DICCIONARIO DE SIMBOLOS Y TEMAS MISTERIOSOS
Federico González Frías

DICCIONARIO

Espiral

La espiral o el conjunto de guardas espirales redondas o cuadradas suele considerarse un solo continuo indefinido. Pero también la espiral es la salida del círculo reincidente hacia lo alto, más allá del plano en busca de la verticalidad. O sea la reiteración indefinida de la cárcel mental o la liberación de la misma por medio de un viaje al más allá, en última instancia a lo supracósmico.

Espirales y dobles espirales, diseños indios norteamericanos
 
Authentic Indian Designs,
M. Naylor.

La doble espiral es otra forma de ida y vuelta reiterada de ese continuo indefinido que además simboliza al universo y a la polaridad de las energías que lo constituyen perennemente. La espiral como salida del plano es la posibilidad por excelencia, o aún mejor, la efectivización de la Posibilidad universal. La espiral ascendente y la descendente constituyen la polaridad de la doble espiral y pueden llamarse evolutiva e involutiva. El ascenso celeste y el descenso a los infiernos, considerando en este caso a la mitad inferior de la figura como el plano de la tierra y del hombre. En esta circunstancia y en el ser humano el punto de inflexión de ambas espirales es el ombligo (omphalos) imagen central de su figura.

Asimismo este símbolo está presente en todas las Tradiciones desde las épocas arcaicas. También en las formas naturales (cardúmenes de peces), como en las caracolas, algunos elementos vegetales (viña) y en los dibujos de ciertos animales (serpientes), en las nubes, en los tornados, en los remolinos de las aguas, y en el ser humano en sus huellas dactilares, en sus orejas, intestinos, etc…, etc…, e inclusive en las formas espiroides que toma su ADN. Las danzas espirales son comunes entre los pueblos arcaicos. Igualmente se la suele asociar con laberintos. Puede ser considerado también el viaje post mortem, es decir el recorrido iniciático, de allí su relación con los laberintos que acabamos de mencionar y con la espiral celeste de la Vía Láctea. El caduceo es un bastón-eje en el que se enroscan dos serpientes espirales distintas, símbolos de las corrientes cósmicas del universo. También la podemos asociar a los remolinos de viento y a su función cosmogónica.

Espirales en diseños del Antiguo México
 
Designs Motifs of Ancient Mexico, J. Enciso.

Volviendo a la doble espiral diremos que ésta puede ser tomada como una expresión tanto macrocósmica como microcósmica y significa siempre la definición en un punto que simboliza lo que progrede o disminuye sin fin, aquello que lo multiplica o divide indefinidamente, así sea el conocimiento siempre reciente de lo estelar o lo subatómico que tiene que resolverse necesariamente en un punto; unidad que da lugar a lo que es, siendo así la afirmación de lo que no es, es decir, de lo verdaderamente infinito que no tiene representación numérica ninguna, o sea lo que siempre estará más allá de todo lo que pueda crecer o decrecer en cualquier ámbito que sea.

Si nos percatamos además de que ese proceso es en el que estamos incluidos, al igual que todos esos seres, fenómenos o cosas y que eso está ocurriendo ahora ya que esas espirales son simultáneas, advertiremos el perpetuo presente y nos sorprenderemos del constante espejismo en el que vivimos junto con la totalidad de nuestros semejantes.

mano con espiral. Sello precolombino.
 
Sello, San Andrés Tuxla.